Pero hay límites y se piden permisos. Por ejemplo, en una embajada. Tengo amigos con amigos embajadores y se han podido alojar puntualmente en el extranjero, dentro de la embajada, como invitados. Lo que no pueden hacer es montarse unas vacaciones en el país Tal y Cual y en vez de ir a un hotel estar 10 días viviendo dentro de la embajada.
También pasa en otros trabajos que conllevan vivir en una residencia, aunque sean de menor perfil. Un conserje de un centro educativo, por ejemplo. Todavía los hay con derecho a vivienda. Siempre puedes alojar a tu pareja y tus hijos, pero a partir de ahí ya no es tan fácil. Un familiar mayor y dependiente, también. Otros familiares no pueden estar permanentemente y se ha de comunicar. Si eres un amigo, te puedes quedar una noche puntual, porque llueve o hayas bebido, pero nada más. Es tu vivienda de uso, pero no es enteramente tuya para tu total disposición como si fuera de tu propiedad. De la misma manera que no puedes hacer obras mayores en la vivienda... El usufructo limita.
Yo entiendo perfectamente que si un nieto de doña Sofía se ha mudado de
modo permanente a Zarzuela haya críticas, a falta de más información. Es lógico y esperable. No es lo mismo vivir en el extranjero, hacerle una visita a la familia en Navidad y alojarse allí unos días que, por ejemplo, estudiar la carrera universitaria en Madrid viviendo en Zarzuela todos esos años.