Arracada (pendiente) del Museo Arqueológico de Córdoba. Es de oro, tendrá sin el asa unos 3x4 cm (a ojo), y está datada en el año 1003 o los inmediatamente posteriores, durante el califato omeya. Hace pareja con otra arracada idéntica, y ambas forman parte del conocido como "Tesoro del cortijo de la Mora", hallado durante unas labores agrícolas en la finca de dicho cortijo de la localidad cordobesa de Lucena, en el año 1964. El tesoro se encontraba dentro de una vasija, junto a monedas de plata y cobre califales y fatimíes, sortijas y brazaletes de plata, un esenciero del mismo metal, y una placa de pizarra con una inscripción que no ha podido ser descifrada. Se considera que este tipo de tesorillos eran enterrados por sus propietarios para salvaguardarlos en momentos de gran inestabilidad, con la obvia intención de recuperarlos una vez pasado el peligro, por ello, tomando como referencia el año 1003, que es la fecha más reciente que aparece en las monedas, se supone que este ocultamiento pudo realizarse como consecuencia de la guerra civil que estalló en 1009 tras el asesinato del valido del califa Hisham II, Abd al-Rahman "Sanchuelo" (nieto de Almanzor y de Sancho II de Pamplona), y que fue el principio del fin del califato omeya de Córdoba, extinguido finalmente en el año 1031 para dar lugar a los primeros reinos de Taifas.
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"Buscad la Belleza, es la única protesta que
merece la pena en este asqueroso mundo"
(R. Trecet)