Si legris, es George Gordon Byron, sexto Barón de Byron. Aunque es más conocido por su faceta de escritor, la muerte prematura de su padre y posteriormente de su abuelo, le elevaron al rango de Lord a la tierna edad de 9 años.
Como Lord, tenía derecho por nacimiento a ocupar su escaño en la Cámara de Lores, donde juró su acta de parlamentario en 1809, donde en palabras del propio Byron, consideraba que su deber era molestar a los partídos políticos, pues no pertenecia a ninguna, si bien podría encontrarse más afín a las teorías del partido liberal, cuyo lider lord Broghton era amigo suyo.
La referencia a la "vacaciones romanas" se encuentra en el poema de Childe Harold, con cuya publicación en 1812 alcanzaría la fama. En el poema, cuando habla de la masacre que los dacios hicieron de los romanos, Byron dice que les mandaban de vacaciones, reconozoco que aqui había que hilar muy fino.
Byron, se autoexilió de Inglaterra, pues no soportaba la sociedad pacata que le rodeaba, y a decir verdad, el tampoco era muy soportado por la sociedad, a la que escándalizaba con sus amorios y disipada vida sexual, así como por unos poemas que consideraban antipatrióticos. Trás una estancia en Suiza, donde coincidiría como Shelley y su esposa Mary, recorrió toda Europa, y vivió grandes temporadas en Italia, concretamente en Venecia.
Su pasión desmedida por la democracia y la libertad de los pueblos, le hizó enrolarse en aventuras de lo más peregrinas, así, en 1821 participó en la revuelta de los carbonarios en Rávena, se enroló en los movimientos contra el Papa, y contra Austria.
En 1823 fue designado miembro del Comité de Londres para la independencia de Grecia, marchando allí en 1824 desde Génova para luchar por la independencia del país, entonces parte del Imperio otomano. Allí escribió su última composición A mis treinta y seis años; dio 4.000 libras y se le designó un regimiento; contactó con los bandidos de Suliotas; fue recibido como un héroe por los griegos, quienes querían hacerlo comandante, y planeó un ataque junto con el príncipe Alejandro Mavrocordatos, pero se desanimó pronto al descubrir las rencillas por el poder de los distintos grupos griegos. Creo que este retrato es más o menos de esa época, esta ataviado a la usanza albanesa.
Allí sufrió un ataque epiléptico y enfermó gravemente. Los médicos le prescribieron unas sangrías, a lo que él se negó. Días después, extenuado por la enfermedad y llamándolos asesinos, permitió a los médicos sacarle toda la sangre que desearan. El 16 de abril practicaron la primera sin buen resultado. Al día siguiente realizaron otras dos.
Murió el día 19 de abril en Missolonghi, sin haber cumplido su sueño de independencia griega.
Enhorabuena Legris.