legris escribió:
Sancho Alfónsez. Su madre fue Zaida-Isabel
Si señor, Sancho Alfonsez, hijo de la mora Zaida (de cristiana Isabel) y esposa o concubina del rey, la cosa no está clara. Lo que está claro es que el chico de 14 años era considerado heredero del reino, según el documento llamado "quirógrafo de la moneda" donde se le llama
puer, regis filius, infans, regnum electus patrifactum y Toletani imperatoris filius y donde su padre le nombra gobernador de Toledo.
Los restos que se conservan de la reina Zaida (la bóveda craneal, la clavícula derecha, el húmero izquierdo y la mitad del distal del radio de ese mismo lado) después de pasar por mil y una manos junto a los del rey y sus anteriores esposas, reposan hoy en día en en el Monasterio de Benedictinas de Sahagún.
Uclés, algún día espero darle un tema propio, tenía siete torres: Albarrana, de la Plata, Blanca, del Homenaje Viejo, Homenaje Principal, del Pontido y del Palomar; estaba amurallado y contaba con seiscientas cincuenta almenas y seis puertas: Herrería, Alcantarilla, del Agua, del Póstigo, Sicuendes y San Pedro.
Los siete condes que protegieron al príncipe no son reales, Sietecondes es una lugar cercano a Uclés donde los almorávides dieron caza y mataron al infante tras la batalla, así que efectivamente no le dieron ayuda ninguna. En realidad le protegían ocho nobles: las mesnadas de los condes Garci-Fernández, Conde Gomecio, Martín Lainez, García de Cabra, Sancho (nieto del Cid), Fernando Díaz, el capitán Alvar Fañez (sobrino del Cid), un guarda espaldas designado por el rey llamado Crispín y el ayo del príncipe, el conde de Nájera.
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La expresión suprema de la belleza es la sencillez.
Alberto Durero.
