El 17 de julio comienzan a llegar a Alarcos las tropas castellanas con Diego López de Haro, señor de Vizcaya, al mando de 10.000 jinetes de caballería pesada.
Diego López II de Haro llamado
el Bueno o también
el Malo dependiendo de quién te cuente su historia
Nacido hacia 1150, hijo de Lope Díaz I de Haro, conde de Nájera (apoyo incondicional de la reina Urraca contra el Batallador) y de la condesa Aldonza, tuvo sus más y sus menos con los Lara durante la minoría de edad de Alfonso VIII. Hacia 1183 consigue el cargo de alférez pero en 1187, a raíz del matrimonio de su hermana Urraca, se pasó a León donde las condiciones le eran más favorables. Su hermana, ya os conté la historia, era amante de Fernando II de León, luego consiguió casarse con él y tener un hijo, Sancho, al que quiso colocar en el trono pasando por encima de Alfonso IX.
¿Os acordáis? Página 38 de este mismo hilo
Como el chanchullo de Urraca no salió bien y Diego había causado buena impresión los 4 años que había pasado en Castilla, el rey le devolvió su cargo de alférez y las tierras de su padre, un territorio inmenso que abarcaba partes de La Rioja, Castilla la Vieja y Trasmiera, las tenencias de Asturias de Santillana y de la Bureba (ojo, aún no es señor de Vizcaya, concesión del rey castellano en 1204 por circunstancias ajenas a Alarcos y que veremos más adelante)
¿Que por qué dos apodos?
Empezaron llamándolo
El Bueno en su época, lo de
El Malo se lo pusieron los Lara cuando se hicieron cargo de la regencia del hijo de Alfonso y Leonor, Enrique I, porque odiaban a muerte al hijo de Diego y querían hundir el prestigio de la Casa de Haro. Para más desgracia, su bisnieto, Lope Díaz III de Haro, se enfrentó descaradamente a Alfonso X el Sabio que como todos sabéis era muy amigo de intelectuales, cronistas y escritores en general que se dedicaron a poner como sotana de dómine al bisabuelo fundador del linaje, por jorobar más que nada. Llegaron a decir que la culpa del desastre de Alarcos era suya.
Pero para entonces los Haro eran mucha familia, mucha riqueza y mucho linaje, y también tenían sus apoyos entre los intelectuales que trataron de contrarrestar la leyenda negra que se estaba atribuyendo a Diego con otra sobre la monarquía: ellos fueron los inventores de la historia de la «Judía de Toledo», que imputaba la derrota de Alarcos al pecado de Alfonso VIII. Pues esta discusión, que si bueno que si malo, que si mito que si leyenda, continuó en los siglos XVI y XVII hasta confundir la historia real de este hombre de tal manera, que se llegó a decir que con él Vizcaya era un feudo independiente, falacia a la que se agarran como un clavo ardiendo los nacionalistas vascos, hasta el punto de querer darme un bofetón por afirmar que Vizcaya es una de las cunas de Castilla
Moraleja: cuidado con lo que decís, dónde lo decís y a quién se lo decís
Vandal, si te pido un arbolito de los Haro igual te estoy metiendo en un lío, porque si lo quieres hacer un poco amplio, son más que los que bailaron en Belén
El dibujo está sacado a partir del sepulcro de Diego en Santa María la Real de Nájera. Al estar elevado en la pared del Claustro de los Caballeros es imposible encontrar una foto con un ángulo que muestre su rostro.
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La expresión suprema de la belleza es la sencillez.
Alberto Durero.
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Gracias