La duquesa de Alba será incinerada y sus restos podrían reposar en la iglesia de la Hermandad de los GitanosEDUARDO DEL CAMPO Sevilla
Actualizado: 20/11/2014 10:43 horas Interior de la Iglesia del Valle, con la Virgen de la hermandad de Los Gitanos. CARLOS MÁRQUEZ La duquesa de Alba ha muerto en su palacio de la calle Dueñas de Sevilla, después de tres días de agonía provocada por una gastroenteritis y una neumonía. Lo ha confirmado poco antes de las diez de la mañana el alcalde Zoido en Twitter. Su cuerpo lo llevarán al mediodía al salón Colón del Ayuntamiento de Sevilla para la capilla ardiente pública, aunque aún no se conoce la hora exacta en que se abrirá para aquellos que quieran despedirse de ella. Previsiblemente será a partir de las 12 de la mañana. El coche fúnebre recorrerá las calles María Coronel, Almirante Apodaca, Plaza Jerónimo de Córdoba, Jáuregui, Puñonrostro, Puerta Carmona, Recaredo, San Esteban, calle Águilas, Cuesta del Rosario y Plaza de San Francisco, donde se encuentra la Casa Grande, sede del consistorio sevillano.
El Ayuntamiento de Sevilla ha decretado
un día de luto.
Pasadas las 10:30 horas han llegado al Palacio de las Dueñas el médico que la ha estado tratando durante estos días, el doctor Muñáriz, así como el confesor de la duquesa y capellán de la casa de Alba, Ignacio Jiménez Sánchez-Dalp. Fuera, en la calle ya se contaban por cinco o seis decenas los sevillanos que esperaban a las puertas del Palacio de las Dueñas para expresar su pésame a la familia de los Alba.
Será el viernes cuando se celebre su funeral en el altar mayor de la Catedral de Sevilla, y será oficiado por el cardenal Monseñor Amigo Vallejo. La duquesa había manifestado en vida su deseo de que sus restos queden en Sevilla en el columbario del templo de la Hermandad de los Gitanos, cuya construcción sufragó y de la que era miembro honorífico. La otra opción, la del pueblo madrileño de Loeches, donde está el panteón de la Casa de Alba, nunca fue del gusto de Cayetana. "Aquello es muy aburrido", ha llegado a bromear en alguna ocasión.
Cayetana Fitz-James Stuart tenía 88 años y era 14 veces Grande de España, entre otros títulos nobiliarios que LA convertían por nacimiento en una de las mayores aristócratas del mundo.
Fuente:
http://www.elmundo.es/loc/2014/11/20/54 ... b4571.html