Es el Cristo del Valle de los Caídos. La talla es de Julio Beobide pero la bellísima y delicada policromía se debe a Zuloaga. Una de las imágenes de "cristos" mas bonita que he podido ver, y ni siquiera sabía que existiera. Tanto me llamó la atención, que fui el verano pasado a contemplarla al natural y me pareció impresionante. Es enorme, la cruz es de madera embastada tal cual se cortó con el hacha y esta en medio del altar mayor. En el momento de la consagración se apagan todas las luces de la basílica y un enorme foco ilumina solamente la figura del cristo. Impresionante.