Es la triste realidad. Va tener que hacer muchas cosas que no le gusten, pero aquí discrepo. Si Leonor quiere estudiar algo que no vaya dentro del programa oficial, que lo haga. No hay mayor puntazo para un royal que presentarse con su título bajo el brazo, el vocacional. Así no quedan medio vacíos.
Que le gustan las artes, que tire por artes; que le gustan las ciencias, que tire por ciencias; las humanidades, pues lo mismo. Esto lo han respetado mucho en una monarquía tan cerrada y tradicional como la nipona. Muchos miembros de la Familia Imperial han continuado sus estudios una vez terminados los que van aparejados con el cargo. Tenemos a Naruhito con la historia, Akishino con la ornitología o a su mujer Kiko con la psicología social, quien recibió su título de intérprete de lengua de signos una vez casada.
Cualquier interés que tenga más allá del cargo, tiene que mostrarlo. Sean caballos o pintar platos de cerámica. Nunca hay que esconderlo, eso gana puntos. Mirad a Daisy.