Yo espero que sus negocios salgan medianamente bien porque de otro
modo sólo podrían hacer caja volviendo a hablar de la monarquía inglesa y la liarían parda otra vez. Pero...
No veo nada exclusivo ni especial en una mermelada de fresas básica como para ir numerando tarros y cobrándola a precio de oro, sinceramente. Además, el nicho de mercado que MM pretende explotar está saturadísimo.
Por otro lado, conozco un poco el mundo del polo a través de un vecino criador de caballos, por lo que yo sé es un círculo pequeño, cerrado, muy elitista y muy, muy discreto. No creo que los verdaderos "ricachones" aficionados al polo en USA acepten alegremente que Harry use su nuevo show de Netflix para exponer lo que sucede entre bambalinas de esos clubes. La discreción y el anonimato es el verdadero privilegio de las clases más altas y lo protegen muchísimo, aunque a Meghan eso le debe sonar a chino mandarín. No les va a gustar nada.
Tampoco entiendo qué saca Figueras de todo esto, excepto que son amigos de hace tiempo y el pobre Harry le debe dar pena. Tendrá complejo de salvador.
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La expresión suprema de la belleza es la sencillez.
Alberto Durero.