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La noticia no ha sido muy bien recibida... La Casa Real noruega no parece ser consciente de la que se les viene encima, que de un momento a otro Harald podría dejar de existir y que Ingrid estará 3 años fuera.
La reacción de Trond:
Antes del fin de semana, TV 2 reveló y el Palacio Real confirmó que el Príncipe Sverre Magnus ha creado su propia empresa, llamada Sverre Magnus Productions. El Príncipe utilizará la experiencia adquirida para desarrollar sus habilidades en los campos del cine y la fotografía, según ha declarado Guri Varpe, responsable de comunicación del Palacio, quien ha añadido que no utilizará su título con fines comerciales.
Solo podemos esperar que esto funcione mejor que en el caso de su tía, cuyas actividades comerciales y explotación de su posición real han causado un gran daño a la monarquía durante muchos años.
A raíz de esta noticia, la agencia de noticias NTB citó a un «experto en la realeza» que se mostró sorprendido por la noticia, ya que «por supuesto, esto va un poco en contra de todo lo que se ha comunicado últimamente, que él tendrá un papel más destacado en la casa real». Sin embargo, como la mayoría de la gente sabe, no se ha comunicado nada por el estilo. Aunque el Príncipe ha asistido a algunos actos oficiales, la línea que se ha comunicado y que sigue vigente es que será libre de decidir sobre su propia vida y carrera.
Después de graduarse de la escuela secundaria superior el verano pasado, el Príncipe aceptó un trabajo en Trondheim durante medio año, pero sus padres se negaron a revelar en qué consistía su trabajo o para quién trabajaba. En febrero se dijo que se iría de viaje durante medio año. En mayo, cuando se le preguntó a su madre sobre las obligaciones reales de los «niños», ella respondió que estaban en un «studenthverdag», que se traduce como «vida estudiantil», pero no hay información que sugiera que él sea realmente estudiante.
Como he dicho antes, es difícil ver cómo la familia real podrá mantener su presencia en la vida de la nación si se ciñe a este plan. Cuatro de los cinco «miembros activos de la realeza» están ahora enfermos o son mayores, o ambas cosas, y la princesa Ingrid Alexandra se trasladará pronto al otro lado del mundo durante tres años. En diez años, el número de compromisos oficiales se ha reducido en aproximadamente una cuarta parte. Para seguir siendo operativa y mantener su visibilidad, la casa real necesitará, sencillamente, al príncipe Sverre Magnus.
Por lo tanto, es de esperar que al menos sea posible combinar su trabajo para su propia empresa con algunas obligaciones reales, tanto en la práctica como sin que ello suponga un conflicto de intereses.
Algún comentario de los vecinos suecos:
La generación más joven ha sido claramente educada lejos de la monarquía y parece no estar interesada en trabajar en la institución. La generación más mayor debe sentir realmente que es una carga ser miembros de la realeza en activo. Al menos eso es lo que nos dice esto a simple vista.
En resumen, están jugando un juego muy peligroso y se extinguirán por obsolescencia en una o dos generaciones.
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