sabbatical escribió:
Dado que Sijena fue un monasterio para hijas de nobles de la Corona de Aragón, no sé por qué no hemos dedicado un hilo a esto
Y tan nobles. El Real Monasterio de Santa María de Sigena fue fundado el 23 de abril de 1188 por la reina Sancha de Aragón, esposa de Alfonso II e hija de Alfonso VII de León y de su segunda esposa, Riquilda de Polonia, con monjas de la Orden de San Juan de Jerusalén y con la intención de hacerlo panteón real, una especie de San Isidoro de León a la aragonesa. La querencia de esta familia por los hospitalarios viene de lejos ya que la tía de la reina, Sancha Raimúndez de León (la que educó a la hija extramatrimonial de Alfonso, la famosa Urraca la Asturiana) había donado a la Orden casi todas sus propiedades menos el Infantazgo concedido por su hermano.
Las primeras monjas eran todas hijas de la nobleza y de la realeza. La primera priora fue Ozenda de Lizana, hermana de Rodrigo de Lizana señor de Buñol, que tenía gran ascendente en la corte de Alfonso II: luchó en las Navas, participó en la conquista de Valencia y murió en la batalla de Muret. La propia hija de la reina Sancha, Dulce, ingresó como monja pero nunca tuvo un papel destacado en el gobierno del monasterio excepto durante el entierro de su madre, cuando le concedieron un lugar de honor al lado de la abadesa.
Sancha siempre tuvo muy claro en qué pretendía convertir Sijena y eligió cuidadosamente a las prioras entre las damas nobles de su círculo de confianza. La tercera abadesa, María de Estopiñán, suplicó a la reina que le permitiese profesar en el monasterio y ella se lo concedió al ser una amiga personal suya. A los 7 años de su ingreso ya había alcanzado la máxima posición en la casa, sin embargo, el poder real de estas mujeres estaba muy reducido en vida de la reina ya que metía mano directamente. Pocas veces actuaron autónomamente y no conocemos los nombres de los siguientes cargos en rango descendente, subpriora y sacristán, porque al fin y al cabo las decisiones las tomaba la soberana sin importarle un pimiento su opinión, así que las fuentes no los mencionan.
En 1321 tomó el mando la infanta Blanca, hija del rey Jaime II de Aragón, fallecida en 1348, y su hermana María también profesó en el convento a la muerte de su marido el infante Pedro de Castilla, hijo de Sancho IV de Castilla y de la reina María de Molina. Falleció allí poco antes de julio de 1347. La hija de María, Blanca de Castilla, prefirió meterse a monja en las Huelgas de Burgos y fue la última que ostentó el señorío civil sobre dicho monasterio hasta su muerte en 1375.
Fue durante la época de Blanca, en la primera mitad del siglo XIV, cuando el monasterio se enriquecerá con tapices, retablos, pinturas y otros muebles y objetos de arte. Luego entrará en decadencia porque las monjas, con poco ojo, tomaron partido por el conde Jaime II de Urgel durante la discusión que acabó con el Compromiso de Caspe. La nueva casa reinante se olvidó de que el monasterio existía.
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La expresión suprema de la belleza es la sencillez.
Alberto Durero.