Sofía, la culpa no la tiene Corinna, al fin y al cabo fue el Rey Juan Carlos el que la trajo a nuestras vidas, pero creo que es más que patente que no tiene nada que ver con otras amantes o "mujeres" del Rey. Discreta, lo que se dice discreta, no ha sido nunca y ahí sí peca de cierta culpabilidad. En resumen, no es una Marta Gayá que hasta la fecha no ha dado absolutamente ningún problema. Es evidente que ha intentando sacar todo el provecho posible, que incluso se erigió como comisionista en el Gobierno de Zapatero, que intentó también tener sus relaciones empresariales con el yernísimo hoy en la trena, hizo y deshizo como quiso y efectivamente el Rey Juan Carlos, más Juan Carlos que Rey en ese momento, lo avaló. No lo tendría que haber hecho nunca, para así ahorrarnos tener que aguantar este show de la amante comisionista, la presuntas mordidas, sus líos y su incontinencia verbal, pero aquí estamos. No se le puede imputar a Corinna que obrara con toda la libertad del mundo, pero sí su actitud posterior.

El escándalo sería intrascendente si todo lo que nos llegara de ella fuese que vivió en una casa en el Pardo, que tuvieron no sé cuantos años de relación, que les gustaba cazar en África, que pretendían casarse... Dan igual las historias de alcoba. El problema viene cuando una vez se partieron peras con ella, ha demostrado ser incendiaria, es de las que después de la separación van con todo a hacer pupa, a intentar quedar por encima y por todos los medios conservar su tren de vida y negocios. No le importa pasear el collar de esmeraldas de la Condesa de Romanones, posar para el Hola o hablar de estrangis con Villarejo cuestiones tremendamente graves. Y ya da igual lo que pretenda con el Rey Juan Carlos o las cuentas personales que tenga pendientes, el tema está en cómo podría y qué interés tendría en hacer daño a una monarquía que le ha importado un comino antes y ahora. Parece como si estuviera recluída, no se la ve en público, ya apenas va a los saraos, pero ella sigue largando lo que quiere a ciertos medios españoles. Su entorno es maravilloso, Inda ya sabemos que es muy buena persona. Tienes que entender que muchos dudemos de sus intenciones, de qué es lo que pretende.

Es perfectamente entendible que su falta de discreción y ganas de figurar hagan dudar a cualquiera de las intenciones de esa señora, pero es que discreta nunca ha sido, ha acompañado al rey en sus viajes de estado como si de una concubina se tratase, si ahora Corina quiere morir matando tampoco se la puede reprochar nada, pues el responsable directo es Juan Carlos, que poco le faltó para sentarla a su vera en las recepciones de Estado, fue él quién le otorgó ese poder, quien nunca la pidió discreción (aunque Corina jamás tuviese esa predisposición como si tenía Marta Cayá)
Resumiendo: Corina es muy libre de comportarse como le de la gana, esa señora no es nadie a nivel de Estado, no debe lealtad a ninguna bandera, en definitiva, no le debe nada a nadie, pero Juan Carlos si, es a él y solo a él a quien hay que pedir explicaciones, me da igual que sea una trepa, una aprovechada o como se la quiera llamar, quién la metió hasta la cocina es el rey, pero lo peor de todo es que no es solo Juan Carlos quién debe de pagar su falta de juicio, es la monarquía y lo que no debemos hacer es convertir a Corina en el anticristo y no reflexionar sobre los errores que han convertido a Corina es un problema.

Es que yo creo que nos queda a todos meridianamente claro que el principal culpable del tema Corinna es el rey Juan Carlos.......pero eso no sirve de excusa para poder decir que ella es una impresentable y él, en el caso de esta mujer, un CANTAMAÑANAS.

Yo me apunto al team "Corinna no es a quien toca lapidar" (entendiendo lapidar en un sentido puramente metafórico). Tengo la (en mi opinión saludable...) costumbre de darles mucho cuartelillo a las que antaño se llamaban "maîtresses en titre" (adoro esa expresión). Evidentemente, esas señoras, salvo algunas muy notables excepciones, se metían en la cama del rey para medrar y hacer medrar a sus parientes. Así eran las reglas del juego antaño y, en ciertos círculos, doy por hecho que siguen siéndolo a día de hoy.

Claramente, ha habido reyes más y menos lúcidos a la hora de elegir a sus amantes y a la hora de gestionar las ambiciones terrenales de las amantes elegidas. Los Borbones, en general, siempre han tenido "poca cabeza" en ese sentido. ¿Que con el devenir de siglos podían haber aprendido unas cuántas lecciones...? Pues sí, qué duda cabe, pero nadie escarmienta en cabeza ajena (sobre todo teniendo en cuenta el hecho, tristísimo, de que el único de ellos que perdió literalmente la cabeza bajo la hoja afilada de una guillotina fue el único de ellos que no había malgastado ni una moneda del tesoro real en resplandecientes favoritas).

Lo siento, pero la cuenta de esos errores de juicio se la paso, íntegra, a Juan Carlos. En eso no relativizo. Corinna sacó beneficio, claro que sí, y, a estas alturas...¿porqué tendría que asumir culpas o echarse encima responsabilidades? ¿Por lealtad a un ex amante, a la corona de su ex amante y al país en el que reinó su ex amante? Anda ya, nadie hace eso excepto alguna que otra rara avis.

Es cierto que la responsabilidad de este tema es del rey Juan Carlos, creo que pocos lo dudan en este foro, ni siquiera los más ultramontanos juancarlistas. Nada que decir.

Pero no se nos olvide tampoco que en el pecado está la penitencia. Al rey Juan Carlos le costó el trono, la estabilidad familiar y la pérdida de una inmaculada aura que le hacía un ser casi mítico a los ojos del pueblo español. Lo perdió de un plumazo, insisto que por culpa suya, y supo renunciar a tiempo para salvar la Institución de la que durante cuarenta años fue cabeza.

Ahora, dicho lo cual, a la señora rubia mientras no calle su boquita, no guarde lealtad a nadie, siga soltando perlitas convenientemente dosificadas para que este asunto no termine de quedar atrás, dejando en evidencia el vínculo claramente comercial con el anterior Jefe de Estado, le seguiré criticando, lapidando y mis tripas se seguirán revolviendo con su sola presencia.

El título de "maîtresses en titre", es muy cool y mega fashion cuando se lee en elevados manuales sobre la vida cortesana en el Versalles del XVIII. A medida que ese termino desciende de las alturas palatinas al nivel donde yo habito se va debilitando: maîtresses en titre=cortesana=meretriz=ramera=prostituta=esta me la guardo que suena peor. Divaguemos sobre el nivel al que cada uno pertenece y que término tiene que usar. Yo me muevo en los últimos peldaños. Y esta mujer, a la que no pienso disculpar por el mero hecho de serlo, sigue pareciéndome una interesada trepa, una bomba de relojería puesta para hacer saltar lo que ya era un polvorín y vive de sacar lo que puede de aquellos que lo tienen porque no es capaz de crearlo por sí misma.

Hizo de su relaciones oficio y medio de ganarse la vida. Tiene un nombre y yo no la soporto ni la soportaré nunca.

Yo puedo lapidar generosamente, tengo piedras para todos...

Esta impresentable mujer es una "trepa" que sigue y seguirá sacando beneficio de sus relaciones, lo cual para nada la dignifica ni la justifica, sino todo lo contrario.

Pero sin duda alguna y desde todos los puntos de vista, para mí el responsable absoluto y único de que haya pasado y pase lo que está pasando y lo que seguirá, la tiene Juan Carlos, su irresponsabilidad fue total y absoluta, imperdonable en un jefe de estado, no me molesto en juzgarle como marido, padre de familia, etc. porque desconozco sus relaciones al respecto, pero como jefe de estado y rey, jefe de una casa real en ejercicio ha sido una "metedura de pata" (siendo fino y discreto) que tiene muchos precedentes, sí, pero no por ello es mas disculpable, le ha costado y bien costado el trono, el descrédito y la burla, todo perfectamente lógico y merecido, se ha cargado 40 años de "adoración" de un amplio sector (algo también para mí incomprensible).

No sé si él aun hoy será consciente de ello, tal vez no, no le veo con la capacidad suficiente para la autocrítica.

El juez reabre la pieza de Corinna que afecta al Rey Juan Carlos

La empresaria alemana Corinna zu Sayn-Wittgenstein vuelve a estar bajo la lupa del juez que investiga al comisario de Policía jubilado José Manuel Villarejo. El magistrado Manuel García Castellón ha reabierto la pieza relativa a la que fuera amiga del Rey Emérito tras localizar nuevas grabaciones realizadas por el ex agente policial, coincidiendo con la investigación abierta por un fiscal suizo a partir de archivos de audio de Villarejo, según confirmaron a este diario fuentes conocedoras del caso.

La empresaria alemana se desvinculó ayer de cualquier tipo de acuerdo tomado en relación a la construcción del AVE y advirtió, a través de su abogado Robin Rathmell, que «cualquier intento por parte de personas en España que busquen utilizarla como chivo expiatorio para restarle importancia a sus propias acciones indebidas enfrentará una respuesta legal rápida» por su parte.

https://www.elmundo.es/espana/2019/09/1 ... b4654.html

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La expresión suprema de la belleza es la sencillez.
Alberto Durero.

Por lo que he leído sobre el interrogatorio en Londres en el que afirmaba estar complacidísima de poder ofrecer respuestas porque ella es muy de cooperar amable y elegantemente con las autoridades ha estado la mar de contenida y discreta.

Hay que jo***se con la amiga entrañable.

Con perdón de la expresión, se está haciendo ca...a.