En lo que a mi comentario respecta he dejado claro que también entre los royals hay gente de escasa/nula valía, por ejemplo, Marta Luísa de Noruega. No me he referido en ningún momento a la sangre azul ya que, evidentemente, un determinado título o status no garantiza la aptitud de una persona para asumir ciertas responsabilidades, y hay muchos ejemplos de ello, como Ernst de Hannover, máximo exponente de la mala educación, la ordinariez y la cutrez más absoluta. Por el contrario, hay consortes sin sangre azul ni títulos, aunque sí con una formación y educación de nivel, como Máxima de Holanda, que no desmerecen al mejor jefe de Estado.
Si se defiende la pervivencia de una Monarquía, hay que hacerlo con todas sus consecuencias, y eso supone aceptar ciertas normas no escritas, pero sí necesarias para su propia supervivencia. A la hora de elegir a la persona con la que mantener una relación seria, cualquiera elegiríamos a la persona de la que estamos enamorados, pero es que cualquiera no somos los herederos a tal trono o segundos en la línea sucesoria. Precisamente por ello, tampoco nos beneficiamos de todas las ventajas que supone dicha posición. Y repito: no tiene porque ser una persona de sangre azul ni cargada de títulos, tiene que ser una persona válida. A Mette-Marit, Ari Behn o Daniel Westling, por ejemplo, yo no les veo el peso suficiente para llevar a buen término su papel….Y esto no es excluyente de otro tipo de razonamientos, como que entre los royals también hay lerdos, o como que cualquiera de estos personajes pueda llegar a hacer un digno papel. No tiene que ver una cosa con la otra.