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Pues anda que el vídeo de María Patiño con cara de "yo sé lo que se cuece" diciendo que él estaba poniéndole los cuernos desde hace años y por eso estaba tan delgada, que esa delgadez era anormal

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La expresión suprema de la belleza es la sencillez.
Alberto Durero.

A puñaos. Como estos ejemplos, hay a puñados de los periodistas patrios. Está bien que hayan quedado retratados. ¡Son basura!

Todos decían saber, que tenían una fuente, un amigo en tal medio británico... TeleCirco, Antena 3, TVE, Tv3, todos dando cabida a las conspiraciones, las mentiras y las faltas de respeto de los trolls. Esto no es periodismo, esto es para retirarle el título a quién lo tenga. O la profesión se pone más severa o van a pasar a ser considerados tarotistas o videntes de cara a la sociedad. Una vergüenza.

Lo peor de la Eyre es que es siempre lo mismo. Le da igual que sea Letizia, Catalina, Mary o la difunta Ena. Con todas usa el mismo modus operandi y los medios osan presentarla como experta en realeza. ¡Ja!

Lo que yo no entiendo es cómo hemos llegado al punto en el que las y los pillan en varios renuncios y eso no les hunde la carrera. Se supone que la base de su trabajo es investigar y contrastar fuentes antes de lanzarse a una piscina con cualquier historia, eso es ser periodista, deben ser súper escrupulosos con lo que cuentan y de dónde lo sacan. Se supone que hay una asignatura en la carrera de periodismo sobre el código deontológico. No vale decir la barbaridad del siglo, poner un supuestamente al final para no acabar en el juzgado y tan contentos.

Si cualquiera de nosotros, en cualquier tipo de trabajo, mentimos, manipulamos o metemos la pata varias veces, por muy buena intención que tengamos, nos despiden fulminantemente. Y a esta gentuza la siguen contratando, es más, parece que cuanto más chiflaos, más los contratan

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La expresión suprema de la belleza es la sencillez.
Alberto Durero.

Lo que dices no solo los retrata a ellos, sino al público que consume sus historias. A la gente no parece que les interese la verdad.

Son unos mentirosos, esos no son periodistas, son chismosos de barrio, cuando dicen que una fuente, que un amigo del círculo íntimo, que la mamá de la mamá de la mamá dijo, me dijo, ha dicho, no les creo es nada; no se si esto sirva de lección, porque el morbo al igual que el sexo vende, pero esto sirvió para quitar la mascara que ya bien caída que estaba de algunos informantes de pacotilla, eso que ya sabemos dejaron detener influencia, y que, como dicen los españoles: viven del cuento.

Vergüenza da contratarlos, lamentablemente seguirán haciéndolo.

Bueno... creo que a estas alturas sabemos de sobra lo que es cierta prensa en España, no debería sorprendernos. Pero lo mismito hacen los británicos, o los portugueses o los latinoamericanos con nuestra familia real dando "credibilidad" a cualquier barbaridad que sueltan Peñafiel o el bodrio de "el nacional".

Es un problema global, y al final quien quiere creérselo se lo cree, y quien tiene dos dedos de frente y un poco de sentido común, pues no.

Tengo la impresión de que lo que ocurre con los Gales, está sucediendo también estos días con los nuevos reyes de Dinamarca que no están haciendo público ningún acto, y todo lo publican a través de su Instagram sin convocar a los medios. Las redes sociales permiten comunicar directamente, saltándose muchas veces a un intermediario, la prensa, que puede ser incómodo. Ahora lo hacen muchos famosos, pero las Casas Reales no son unos famosos más.

Yo creo que ahí ha estado parte del error de esta estrategia de comunicación. Si hubiesen cogido a un grupo de periodistas de medios británicos serios que habitualmente informen sobre la casa real, y les hubiesen trasladado un mensaje que reflejase más la seriedad de la situación, podrían haber contribuido a crear opinión y a equilibrar la balanza. Pero al final, si no tienes a esa prensa un poco más seria para equilibrar las cosas, y estás sólo en manos de la redes sociales, las cosas acaban fatal.

Lo mismo que por la razón que sea, en España los temas de realeza, de monarquías o eventos reales los llevan los mismos tipos gays que llevan el cotilleo de famosetes y nos parece normal. Nunca invitan a comentar a gente que sabe, a historiadores, a periodistas serios, que también podrían serlo. Espero que todo el mundo entienda que me refiero al que ejerce de.

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Nada que añadir a lo dicho por todos, como afectada por el cáncer solidaridad total, y para bien y para mal no son una familia a la que se pueda medir por el rasero de una middle class, ni en los deberes y obligaciones ni en los medios, apoyos y ventajas que tienen a la hora de hacer frente a todo lo que se te viene encima, que es mucho, pero mucho, mucho eh, y de descoloca todo lo que ingenuamente creías que controlabas. Lógicamente, por ser quien son, considero normal que no tengan que hacer frente ni a dificultades económicas, que se pueden presentar, ni a dificultades logísticas, con los niños, familia, mascotas (s también), trabajo, etc, etc.
Llegar a tu casa de la quimio y tener todo resuelto, entiéndase ese resuelto desde del punto de vista practico, no comida, no colada, no compra, no gestiones, no médicos, no nada que no sea tus niños, tu recuperación, debe de ser un lujo que no está al alcance del común, al menos no mío, no quiero personalizar porque no tiene nada que ver una situación de gente común con la que tiene que enfrentar un miembro, una familia real de primer rango, entonces no caben comparaciones con yo, mi, me, ellos, repito, tienen otro modus operandi, para bien y para mal, no comparemos por favor, no ha lugar. Catherine tiene una enfermedad jodida y un tratamiento mas jodido por delante, no hay nada mas que decir mas allá de hazlo como puedas.
Ahora bien, una cosa no quita la otra, como herederos de la corona de Gran Bretaña, ahí es nada, lo han gestionado mal, sin mas, mal, y hago especial hincapié, o único hincapié en William, creo que es la primera crisis que enfrenta públicamente como responsable en su vida, pues nada bien, no lo ha hecho nada bien, o tiene un pésimo staff, o es un inconsciente o nadie le ha cantado nunca las 40. A la vista de lo visto, si le toca un marrón como a Felipe VI, ahora mismo GB sería una república.

Aparte del tema en cuestión, creo que es un error por parte de las casas reales, hacer oídos sordos, hacer como si nada al ruido en rr.ss. o ponen pie en pared o se los va a acabar comiendo, no pinta nada bien todo lo que estamos viendo y viviendo, y hacer como si nada no hace que desaparezca, ellos verán, tienen a miembros muy jóvenes dentro de las Casas que los pueden hacer puré en un par de semanas, que se vayan preparando, que no es un tema de que digan lo que quieran que es cuestión de aguantar y esperar que escámple, no, no funciona así, el never complain never explain funcionó en el XX, en el XXI no.

Dijeron que la iban a operar, dijeron que la recuperación sería de meses y que no la veríamos en una temporada por lo menos hasta el mes de abril. Todo esto ya en enero. Tampoco me parece que lo hayan hecho tan fatal. Lo que pasa es que nosotros les hemos exigido que de eso nada, que enseñaran y contaran todo. NO hemos repetado su derecho ni el de sus niños, que siendo tan pequeños necesitaban la mínima información posible.

Dejemos de culpar al palacio y empecemos a mirarnos a nosotros.



Una cosa os voy a decir, yo que Catherine dejaba de usar el anillo de su suegra y lo metía en un cajón.

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La prensa ha inventado y seguirá haciéndolo siempre. Ya sea por intereses que defienden o sólo el hecho de generar vistas y vender.

En la era de la información, el modo de comunicación que tomen las casas reales (y jefes de estado en general) es clave. Kensinton ha fallado en la comunicación estrepitosamente. Iselén remarcó perfectamente todos sus errores y dio un muy buen ejemplo de una mejor estrategia.

Y hay que hacer un mea culpa, porque cuando el chisme es sobre alguien que no nos cae bien (o les cae bien a los que nos caen mal, entonces por simple inercia lo odian), nos lo creemos sin ninguna prueba, lo repetimos y se elucubran teorías iguales de feas que sobre las de Kate.