Después de pasar todo el sábado en la boda de mi querida Viktoria, todavía no sé si estoy más contenta por mi si por ella. Me dura desde sábado una sonrisa en la cara, y si es obvio que me encantó poder seguir integralmente la boda y sobre todo una boda tan emotiva como esta, también es verdad que me he quedado exultante por mi princesa preferida.
Nunca me he interesado mucho por la realeza pero desde niña siempre he sentido una enorme simpatia por Victoria. Mucho más que por todos los otros herederos, principes y afines. Esta chica en una posición única - que puede ser tanto privilegiada como torturante, dependiendo de la perspectiva - me venía en mente cuando me enfadaba con algo y empezaba lamentando mi vida. Al pensar en ella, siempre agradecia por mi vida de libertad y poder de decisión, por ser libre de empezar cada día como una página en blanco para llenar como me diera la gana.
Victoria, a pesar de todo, a pesar de su azar, fue capaz de resistir. Yo en su lugar hubiera cedido mis derechos a el señorito mi hermano y ala a vivir una vida regalada. Sin embargo, ella porfió en dar su mejor aunque le costaba mucho, y mismo cuando de solo mirarla todos veiamos como se sentía por dentro, Victoria continuaba siempre sonriendo, siempre simpática, dulce, cercana, alegre. Simepre ha sido la princesita querida de los suecos y quizá fue ese cariño de su pueblo que le dió fuerzas para seguir luchando. Victoria parecia la niña querida de todas las familias reales, la mejor amiga de todos los principes, la mejor confidente, la mejor compañia, la más divertida. Un encanto de chica, vamos. Y cuando empezó su relación con Daniel, se la veía
absolutely blooming!!! A mi me daría igual que el fuera un analfabeto zarolho y cubierto de acne, porque se ve que a Victoria le hacia feliz. Y más, no creo que ella se hubiera enamorado de uno qualquiera, una persona así de especial y inteligente como Victoria seguro no se contentaría al no encontrar la sintonia entre su caracter y el de su novio.
Y como
chi la dura la vince, Victoria ha finalmente logrado llevar la suya adelante contro todos impedimientos. Tampoco creo que ella hubiese permitido que no se la dejara casarse con quien muy bien le apetezca, era el minimo que merecía por su impecable conducta encuanto princesa. Después que se anunciara su compromiso, su felicidad era absolutamente contagiosa.
Y si dudas permanecian, estes dias de celebraciones por su boda no podian dejarlo más evidente. Victoria estaba absolutamente
ravissante, encantada y eufórica como una niña pequeña. La boda fue una maravilla en todos sentidos; quizas desde fuera haya algunas cosas más
tacky, pero incluso esas fueron bonitas, y además estar enamorado es ver ternura en todo lo que los demás ven cursilleria, o no? Excepto los niños, todos tendemos a ridicularizar un poco las manifestaciones de cariño que no nos sean dedicadas. Pues yo debo ser bastante infantil , porque no me importaria nadica de nada que mi novio fuera tan cariñoso, y a Daniel no le veo edulcorado, le veo sí como alguien que finalmente puede expresar libremente lo que siente. Daniel a mi no me sorprendió demasiado, estaba segura que Viktoria sabría elegir muy bien su principe.
Ya lo sé que soy un poco ridicula, pero no me interesa, yo adoro Viktoria y me encanta verla tan feliz. Y a quien se mofe de mi, pasar bien!