|
Ana, yo creo que los trajes de gala pueden ser sobrios...y bonitos a la vez ;-) El que lleva la reina Sofía en esta ocasión, lo diré de paso, no me parece sobrio: por el tejido, resulta demasiado barroco para que merezca el calificativo de sobrio. Y desde luego no lo encuentro bonito, tampoco. El traje de Letizia es sobrio si atendemos al tejido, al corte y a los tonos empleados, pero no me gusta. Eso no quiere decir que no vayan estupendas...¿eh? A mí no me convencen los trajes, pero ya vemos que a Sabbi, por ejemplo, le gusta el Varela de Letizia pese a que Sabbi es muy crítica tradicionalmente con los Varelazos ;-) Con la ropa siempre pasa lo mismo...lo que a unos disgusta, a otros gusta.
En cuanto al último comentario, perdona que sonría entre dientes. Comprensible que los asistentes tengan ganas de irse a disfrutar del día con sus hijos y/o nietos, o con los sobrinos para cumplir con aquello de que a quien Dios no da hijos el diablo manda sobrinos, etc. Pero es un evento oficial de gran envergadura, uno de los más destacados del año, así que voy a considerar siempre que quienes participan en él, lo hacen conscientes de su importancia, de su trascendencia, por lo que, si desean que el tiempo dedicado a ello pase volando, eso es algo que debe ir por dentro y nunca, jamás, influír en su actitud pública ;-)
|
