Perlery lleva más razón que un santo, elparaiso2008. Las opiniones son, por su propia naturaleza, absolutamente subjetivas y por eso mismo siempre discutibles. Eso sí, ninguna es mas válida que otra, jejeje, son simplemente opiniones. Siempre merece la pena confrontarlas con vehemencia pero con una chispa de humor. Lo que nunca merece la pena es acabar cruzando puyas por unas simples opiniones acerca de si una princesa, la que sea, es lo más de lo más o lo menos de lo menos.
Dicho lo cual...ahí va mi propia opinión, jejeje. Creo que Carolina era una joven de muy notable hermosura y con una magnífica silueta, lo cual le permitía lucir extraordinariamente los vestidos -de alta costura- que se ponía. Ejemplo:
Pero en esa época, yo no aplicaría la palabra "distinción" a su persona. Era más llamativa que distinguida, para que me entiendas, porque sus posados se asemejaban más a los de una top-model que a los de una princesa de buena y sólida estirpe real. Dos ejemplos de posados muy top-model pero poco princesa:
Esos magníficos posados hicieron de ella no sólo una figura icónica de las tendencias de
moda, sino una especie de referencia constante de mujer que siempre desprendía un aura poderosamente atractiva...
...pero sigo sin considerarla un caso de "distinción principesca", aunque la distinción principesca, todo hay que decirlo, suele resultar bastante más aburrida, jejeje. En cualquier caso, yo a Carolina la percibo muy distinguida cuando tras una etapa de relativo alejamiento de la actividad social que coincidió con su primer período de viudedad y los años de relación con Lindon, vuelve de pronto a la palestra tras su boda con Hannover. La nueva princesa de Hannover, ya más madura, más asentada físicamente y sin duda psicológicamente gracias a los avatares de su vida privada, sigue siendo muy hermosa aunque haya perdido el brillo de la juventud. Y en vez de mostrarse tan llamativa, aprende a mostrarse más reposada, serena y con una elegancia que va más allá de la ropa o los complementos elegidos. Ahí sí la encuentro distinguida, de la cabeza a los pies. Como dirían los franceses, ahí sí que
elle a beaucoup de charme et beaucoup d´allure.