josefita escribió:
Puede ser que me equivoque, pero en esta historia, da la impresión, que faltan fuentes fiables que permitan una aproximación mas real a los personajes y a sus puntos de vista. A diferencia de la gran VR y toda su familia, zarina incluida, los Habsburgo no parecen muy aficionados a compartir sus opiniones y sentimientos mediante cartas de naturaleza personal. Si a esto unimos, la estricta etiqueta y la férrea censura, el margen para la imaginación es tan amplio, que cualquier afirmación, puede convertirse en verdad universalmente aceptada, o fácil de rebatir. Sus acciones, tan medidas y encorsetadas, dicen poco de ellos mismos.
¿Por qué tras la primera bomba FF no insistió que Sophie abandonase el coche?. Alguien tan tenaz, (cabezota), ¿no fue capaz de imponerse, pese a sus negros presentimientos?.
Y la pregunta que siempre me he hecho, ¿Por qué no exigió FJ la renuncia al trono en vez autorizar el matrimonio morganático?, ¿se habría casado entonces FF?.
Bueno...yo creo que esto último tiene su sentido considerando la penosa situación en la línea sucesoria de los Habsburgo. Y me explico: Franz Joseph sólo había tenido un hijo varón, Rodolfo, que había muerto en unas circunstancias tremendas desde el punto de vista de un hombre como el emperador. En aquella tesitura, en el año 1889 se encontró convertido en heredero del trono Karl Ludwig, que nunca había sido ninguna lumbrera y encima contaba cincuenta y seis años. Franz Ferdinand se convirtió en el sucesor tras la renuncia de su padre, que moriría relativamente pronto aquejado de fiebre tifoidea. Podemos decir que ya era un "heredero de rebote", no excesivamente popular porque carecía de una imagen de príncipe encantador y le faltaba carisma según los vieneses. Pero...con todo, FF era el nuevo Thronfolger y el amplio clan Habsburgo hubo de cerrar filas en torno a él. Por supuesto, se presuponía que se casaría con una princesa de fuste, nadie esperaba que fuese menos en ese sentido que su propio hermano Otto el Hermoso, con una malísima reputación entre los austríacos por su vida extremadamente disoluta.
FF jugó sus cartas bien, porque él nunca amenazó con casarse con su Sophie sin el consentimiento de Franz Joseph. El desafío era: "o me caso con Sopherl, siempre previo permiso imperial, o no me caso". Lógicamente, no podían privarle de la sucesión por "no casarse". Pero la idea debía darle escalofríos a Franz Joseph...un Thronfolger solterón, esperando con ansia a que él estirase la pata para recibir el trono y luego, ya siendo el soberano, tomando la decisión de desposar a Sopherl. Podemos pensar que FF no se hubiese impuesto a sí mismo y a la mujer que amaba las terribles restricciones que le exigió FJ para permitirle desposar a Sopherl.
De hecho, FF nunca le dió ni un motivo a FJ para desposeerle de sus derechos. Se casó sólo cuando FJ cedió...y aceptó a cambio de las renuncias indicadas. De paso, estamos subestimando la influencia de la archiduquesa María Theresa. La viuda de Kar Ludwig era, de hecho, la primera dama de la corte, una vez retirada del papel protagonista la viuda de Rodolfo. Franz Joseph estimaba y admiraba a su cuñada María Theresa. Verla a ella satisfecha compensaba en parte la gran decepción que le había causado la boda desigual de un sobrino que no le gustaba demasiado y de quien se fiaba más bien poco.