Lo del Ducado de Edimburgo es como dices, Deste. Es Charles, una vez proclamado Rey, el que tendría el derecho a conceder el título, en nueva creación, para su hermano Eduardo. Y visto lo visto, sería algo que iría más allá del acuerdo familiar al que llegaron. Sería su forma de rendir tributo al hermano menor, puesto que Carlos y Guillermo tendrán que apoyarse muchísimo en los Wessex. No hay más miembros jóvenes para cubrir todo lo que tiene que cubrir la Corona británica. Serán fundamentales hasta la mayoría de edad y el final de la época estudiantil de los niños Cambridge. Así que, no descartemos nada antes de tiempo.
En cuanto a Andrés... si las cosas se ponen peor, el Parlamento podría pedir y votar la retirada de su título. Y ese título es el Ducado de York. Y no es descabellado pensarlo. Puesto que a los políticos se les exige pulcritud, éstos también deben exigírsela a alguien que otrora fue por ahí representando al país. Se han cargado a primeros ministros por el Brexit (y ya veremos si no se cargan a Boris por las fiestas en Downing), ¿no van a aplicarle un correctivo público a un desastre como Andrés?
Cuando digo que Clarence House ha debido tener más decisión que Windsor en todo esto, es por el carácter de Lilibet y los antecedentes.
Estoy segura de que esa mujer se creyó las explicaciones de su hijo y que no puso en duda en ningún momento su conducta. Porque es así, porque cree en las personas y en su redención. Y se trata de un hijo, de ahí que diera el ok a la lamentable entrevista y que permitiera que se llevara a cabo en Buckingham. Puedes manipular a mamá, que te quiere y puede creer que el mundo está siendo injusto contigo, pero no a millones de personas y a una periodista que iba ultra preparadísima (me río de Oprah), dispuesta a ser lo más imparcial y veraz posible.
No es baladí que Charles montase en cólera (según los royal correspondents) y que decidiese tomar él mismo las riendas de la situación, pasando por encima de su madre y de medio Buckingham. Y entre las medidas que tomó estuvo la de materializar aquello que venía haciendo saber desde hacía años: que su hermano Andrés no tenía cabida en la FR.
Así se hizo: ni agenda ni actos públicos más allá del funeral de su padre. Se acabó el desempeño de Andrés como miembro activo de la Firma. Y ahora esto.
Me da pena la Queen, pero no sé pueden arreglar las cosas de otro
modo. Y esto ni siquiera es un arreglo, es un intento por contener la hemorragia que lleva causando este hombre desde hace años. Solamente falta que entren también en lo de sus dineros. Esto se podría volver más feo que el
annus horribilis .