La boda como ya comenté, se realizó en la capilla del palacio de Drottningholm, Esta estaba iluminada por velas naturales colocadas en candelabros de hirrro y otros de plata sobre el altar.
El altar estaba decorado con rosas blancas.
A las 12 hs. cuando ya se encontraban en el interior de la capilla los 190 invitados, llegó la familia real. Primero las hermanas del rey.
Margaretha, con un traje de seda marrón estampado; Brigitta de terciopelo marrón más claro; Desireé, la más elegante, con un vestido color champagne y Cristina con un amplio
modelo de terciopelo color rojo.
y tocadas con sombreros de piel marrón.
La pequeña Helene Silfverschiold, hija d ela princesa Desireé que actuó de damita de honor se sentó al lado del coro para cuidar el ramo de flores de la novia, que es su madrina.
El conde Sigvard Bernadotte, iba acompañado por su esposa Marianne, de rojo estampado y cuello de piel. El tercer hermano de Bertil, conde Carl Johan, se encontraba en ese momento en Estados Unidos, y Kristin se había fracturado un pie en el extranjero.
La reina Silvia llevaba un vestido estampado gris verdoso y un turbante de la misma tela y su collar largo predilecto, regalo de sus cuñadas.
Los invitados varones, fueron vestidos de jacquet y la reina Ingrid de Dinamarca, vestía un conjunto de vestido y sombrero de un suave lila grisáceo y un chal sobre los hombros sujeta con el broche en forma de margarita. que la reina Margarita luciera el día de su boda.
Los novios entraron desde la sacristía tomados de las manos, ofició el servicio el arzobispo Olof Sundby.
El traje de novia de Lilian fué confeccionado en Inglaterra, y era de seda salvaje de un color azul muy suave, largo y liso.
Como únicas alhajas Lilian usaba un gran broche de brillantes y un collar de tres sartas de perlas y en vez de diadema, un tocado de plumas del mismo tono que el vestido.
El ramo de novia era de muguettes.
El príncipe contestó con un claro "si" a la pregunta si quería como esposa a Lilian Craig. El "si" de Lilian fué débil.
Como con la mayoría de los novios, Bertil tuvo dificultad para colocarlo en el dedo de la novia. Cuando la alianza quedó por fin firmemente sujeto al dedo, Bertil besó la mano de Lilian en un gesto de gran cariño.
El cantante de ópera Hakan Hagegard, interpretó la "Canción de esponsales" de Beethoven.
Un periodista se acercó a la princesa Lilian y le preguntó cómo se sentía, y ella muy emocionada respondío que "Maravillosamente, maravillosamente del todo"
Y a otra pregunta sobre su luna de miel , respondió; "¿Luna de miel ? creo que somos demasiado viejos para eso.."
El banquete de bodas se sirvió en el palacio real de Estocolmo.