Vamos a ver, vamos a ver yo os pongo ahora mismo un video de cuando falleció Mitterrand, a cuyo funeral fue toda la realeza reinante, y no resiste comparación alguna. Y hablamos de una señora república como es la francesa.
Fue hasta Fidel y se siguió un orden exquisito. Respetando el protocolo, los años en el cargo, la vecindad... La salida, impecable, trasladando a todos los invitados hasta el Elíseo.
Es que me dan ganas de hacer un hilo, porque no se puede soportar lo de hoy.
Otro ejemplo de un acto con representación extranjera, tremendamente bien organizado, fue el funeral por las víctimas del 11-M. Impecable. Como fueron recibidas las comitivas, como y donde las sentaron, el besamanos para el pésame en la misma catedral.
Más familiares son las bodas escandinavas, no así las españolas, y jamás han hecho algo semejante. Los royals entran casi a la vez, mezclados por familias o parejas, sin problema. Se sientan en orden y salen de nuevo todos juntos, sin alteraciones como las de hoy, que parecían estar esperando el autobús en el intercambiador de Moncloa mientras los Windsor menores tiraban para el metro.
Así se llega y así se sienta a un royal en un evento de estas características. Todos juntos, pero en orden. Todo medido. Y saliendo como entraron. Protocolo puro y duro.
El funeral del Gran Duque Juan fue otro evento digno de mencionar. La Boda de Felipe y Letizia sólo tuvo un pero y es que se apelotonaron todos en la salida hasta que llegaron los autobuses para trasladarlos al Real. El paseíllo que nos robó la lluvia por la plaza de armas es una espinita clavada. Pero por la puerta principal no salió un político ni otro invitado antes que un royal reinante o Jefe de Estado. Ni uno.