Querida Nana, como bien te podrá acreditar Sabbi, soy un cero a la izquierda en cuestiones "tecnológicas". No había caído en absoluto en que también podía dejar un comentario en tu blog, jajajaja. Por supuesto, puedes publicarlo allí, pero además...¿me recuerdas la dirección del blog, para guardarla en favoritos? Soy un pelín desastrosa para esas cosas, pero recuerdo haber leído el blog y recuerdo que me agradó muchísimo y deseo volver.

El capítulo Félix tiene unos puntazos...De nuevo, no quiero pecar por meter "spoilers", pero la forma que tiene tu Félix de tratar de describir lo que es y lo que representa cada mujer eligiendo una pieza musical que represente a cada una de ellas me ha fascinado. Cuando llegué a María Paulovna, casi me da el ataque de risa. Risa auténtica, genuína, jajaja. Sí, ella era exactamente así

Nana, te voy a decir una cosita ahora que nadie nos lee . Para escribir una buena historia, sólo hace falta tener claro lo que se quiere contar y contarlo con cierta elegancia narrativa. Pero para escribir un libro que te "envuelva" en la atmósfera propia de una época determinada en unos lugares muy concretos...para eso hace falta tener una sensibilidad especial. Tú la tienes, Nana. Igual que, en este foro, yo he visto a menudo el mismo talento en Iselen. Si Iselen escribiese un libro sobre cualquier personaje de la época medieval, yo iría corriendo a comprarlo incluso aunque estuviésemos a fín de mes y me representase un gran esfuerzo, jajajaja. ¿Porqué? Porque no sólo sabéis contar una historia de principio a fín, arranque-nudo-desenlace. Es que resulta que, además, ponéis "corazón" en ello. Latido a latido de corazón en cada página. Y eso es lo que hace que, cuando estás tumbada en el sofá con el libro entre la manos, te haga sentir que te transportas hacia atrás en el tiempo, que llegas allí, que tratas con esa gente y que te resultan cercanos y queridos. Por eso deseaba estar con Natasha en su final, sujetándole la mano mientras su respiración se hacía más y más trabajosa.

No sé si expreso adecuadamente el sentimiento -apremiante- de simpatía y cariño por Natasha, pero espero que se entienda lo que deseo transmitir, jajajaja.

Nana, por favor, piensa en escribir algo sobre las tres mujeres que te indiqué, aunque sea un simple tema en el foro No hay nadie tan capaz de hacerlo como tú.

Querida Minnie, claro que te explicas adecuadamente respecto a los sentimientos que en ti despierta Natasha. Estuvieras o no de antemano predispuesta hacia ella, es evidente que si piensas que te gustaría tomarla de la mano en el momento final de su vida, te ha llegado el personaje.
Félix…? No te imaginas los comentarios tan geniales que está recibiendo ese capítulo. También el de Dmitry, pero Félix le supera con mucho.
El tema de los Vladimirovich no es precisamente de mis preferidos. La verdad es que me he referido a ellos para manifestar mi opinión (haciendo algo de historia) de la NO legitimidad actual de María Vladimirovich.
Marie Pavlovna si debió ser alguien muy, muy especial. Por eso, al asociar, perdón, cuando Félix asocia pasajes musicales a ciertas figuras, no duda en la rotundidad que debe tener esa pieza.
El blog:
http://www.mikhailalexandrovichromanov.com/
Subiré una captura de pantalla en la que puede verse los lugares tan dispares y lejanos desde donde hay visitas.
Es bueno saber que la historia despierta eso, curiosidad histórica en conocer del pasado…

Algunos amigos, han preguntado por el modo de datación que aparece en el libro. Subiré una imagen para que vean que no ha sido invento mío¡¡¡
Diría, que así se fechaba a la antigua….




Vean abajo, a la derecha...

Otra de las preguntas más comunes es saber que hay de cierto en que según antigua costumbre, los rusos tomaban el té en el plato, antes que en la taza.
Debe haber algo de orientalidad en el significado que en Rusia tiene y ha tenido, la ceremonia del té en todos los estratos sociales. Subiré antiguas imágenes y en una de ellas, verán que lo toman tal como señalo en el libro.

Había olvidado decir algo.
A una pregunta que respondí: no, que era difícil, pues resulta que SI ¡¡¡¡
Si, genial y estupendo.
Ya les iré contando…

Creo que es una costumbre de las clases digamos populares, no?

La mujer del comerciante tomando el té (1918) de Boris Kustodiev



Pintura con samovar de Vladimir Makovsky

Dos imágenes poco vistas. La primera es del comienzo del romance entre Mikhail y Natasha. La segunda, junto al querido Jack, la encontré hoy mismo¡¡¡

Natasha era guapa...¡y estilosa! Le quedaban estupendamente los sombreros, debo señalar. En otras circunstancias, hubiese llamado bastante la atención en la corte imperial como contrapunto para Alix...