Juana era hija de su tiempo y sus circunstancias y nuestro problema, en el siglo XXI, es zambullirnos en ese tiempo y esas circunstancias con la mentalidad de ese tiempo y esas circunstancias. El mundo moderno nos ha hecho duros de mollera

¿Por qué resulta extraño pensar que una chica que tenía visiones místicas se colocó al frente de un ejército y sus contemporáneos medievales se lo consintieron e incluso lo propiciaron? Hace 75 años Hitler subió a un monte y no sé qué ninfa o sibila o algo así, le dictó las directrices del nazismo y profetizó el triunfo del III Reich y los alemanes se lo creyeron, lo consintieron y lo propiciaron. Repito, hace 75 años. También se lo consintieron a Mahoma y a su Corán dictado por el arcángel Gabriel muchos siglos antes que a Juana.

Todos ellos son casos claros de "discurso adecuado en el momento adecuado frente a los oyentes adecuados que oyeron precisamente lo que querían/necesitaban oír". Y ninguno lo planeó, ni buscó las palabras exactas a propósito, ni sabía en qué iba a parar la cosa porque no eran adivinos. Los militares dicen que el Azar es un soldado más del ejército, en la historia la suerte también es un factor y Juana la tuvo al principio, luego no tanto

Independientemente de si estos tres personajes eran bipolares, esquizofrénicos o les faltaba una patata para el kilo... la cuestión es que en su tiempo, su discurso y sus actos cuajaron entre sus gentes aunque hoy nos parezca que hay que ser idiota para que lo de la ninfa cuele

Príncipe de París te diría que puede que los milagros existan, o puede que no, pero está claro que Juana fue un milagro para su gente

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La expresión suprema de la belleza es la sencillez.
Alberto Durero.