Konradin escribió:
Pregunto en serio y con total desconocimiento, ¿no es mejor que siga afuera? Pareciera que cada vez que pisa España crea problemas.
Es mejor que no. Su situación está creando muchas frustraciones y enfados en un sector que no debe ser por ello menos escuchado. Sobre todo porque comparan la situación de JC con la de otros políticos acusados por cuestiones varias. Entienden que hay distintas varas de medir. Las distintas varas de medir, para mí, son admisibles pues jamás compararé a un político o a un empresario con un Rey, pero es comprensible que otros lo vean de otro
modo.
Un político socialista, Rubalcaba, solía decir que en España enterramos muy bien. Si ese día llega, muchos españoles borrarán momentáneamente de su recuerdo parte de los últimos años de su reinado y recordarán la época de la Transición, las primeras décadas de democracia, los gloriosos 90s, etc. En el balance, las cosas se pondrán en su lugar. Así que no es de recibo que la situación quede así a perpetuidad.
Eso sí, si regresa, tiene que obedecer y empezar a vivir una vida cual monje cartujo. Y según mi parecer, es necesariamente higiénico que dé alguna explicación o, en su defecto, ofrezca unas sentidas disculpas por lo que nos ha hecho sufrir estos años. Al primero que deberá ofrecer esas disculpas es a su Real hijo.
El principal problema que tienen la Casa y el Rey es domeñarle y que pase por el aro. A él y a sus amigos. Pero estoy segura que serían capaces de lograrlo.
Por lo pronto, el Twitter de Casa Real ha publicado la información respecto al funeral de hoy, que él ha asistido y se han incluido fotos, sin ningún ánimo de esconder absolutamente nada. Eso ya es un paso para intentar normalizar la situación, aunque el Rey Felipe ha contado con dos buenas escuderas en el día de hoy. Ante esa situación, han sido su perfecto dique de contención.
Al principio habrá gente que echará espumarajos por la boca, pero esto no resiste mucho tiempo más. Esperemos que sus cuentas pendientes en Londres se resuelvan y que regrese y se instale en España, que no en Zarzuela, con total discreción.
Es mejor pasar el mal trago de lo escandaloso o perjudicial que podría ser su posible regreso, que no perdonarnos jamás que haya muerto como un apátrida. No tiene delito de sangre alguno en su haber para recibir tal castigo de por vida.