Es curioso que al-Safidi decidiese incluir la historia de nuestra protagonista en su diccionario de biografías. Hay que tener en cuenta que él escribía para mamelucos a los que la insólita historia de El Qutlugh, una mujer de clara tradición mongola que no encajaba con los parámetros de una musulmana pese a haberse convertido a esa religión, en principio no debía interesar mucho. Y no sólo la incluye, sino que alaba su fuerte caracter y personalidad.
Tampoco esperéis una biografía al uso. Al-Safidi sigue el mismo esquema en todas sus entradas: una introducción sobre el caracter y los antecedentes familiares y un par de anécdotas o tres acerca de esa persona. Así que vamos allá.
Era El Qutlugh hija de Kan Abaqa (1234-1282) el segundo kan mongol de Persia y bisnieto de Gengis Kan. Su padre y abuelo de nuestra protagonista, llamado Hulagu, a quien vemos aquí con su esposa Doquz Khatun
destruyó los dos mayores centros de poder islámico, Bagdad y Damasco. Simpatizó con el cristianismo toda su vida hasta que al final de su muerte se acercó al budismo, lo que molestó mucho a su esposa que era cristiana nestoriana. Mantuvo de todas formas buenas relaciones con los cruzados y envió diversas embajadas a los reinos occidentales (conservamos la carta dirigida a Luis IX de Francia). Esa tolerancia y buen rollo con todos fue característica de esta dinastía hasta su conversión al Islam.
Niccolò y Maffeo, los tíos de Marco Polo, eran muy amigos de Hulagu y fuen quien les proporcionó el salvoconducto que les permitió llegar a la corte de Kublai Kan, hermano de Hulagu.
Kan Abaqa en cambio era una persona de naturaleza pacífica en cuanto a la guerra pero seguidor de la polítca tolerante de su padre. Intentó convertir a los musulmanes persas al budismo y también procuró promover el Nestorianismo
* al que era adepta su madre, al punto que envió embajadas al papa Gregorio X y a Eduardo I de Inglaterra
* El Nestorianismo es una doctrina religiosa que considera a Cristo radicalmente separado en dos naturalezas, una humana y una divina, completas ambas de
modo tal que conforman dos entes independientes.
A partir de 1265, Abaqa procuró obtener ayuda de Occidente para enfrentar a la amenaza que representaban los mamelucos. Recibió el apoyo del Papa Clemente IV, del emperador de Bizancio y... de Jaime I de Aragón, que intentó una fallida expedición a Acre en 1269
La ayuda del emperador estaba clara puesto que era su suegro, Abaqa estaba casado con María Paleóloga, hija ilegítima de Miguel VIII Paleólogo.
Abaqa a caballo, frente a su hijo y su pequeño nieto.
María Paleóloga en un mosaico del monasterio que fundó en Constantinopla, a donde volvió tras la muerte de su marido.
Por su intolerancia hacia el islam, la religión practicada por la mayoría de sus súbditos, muchos musulmanes intentaron asesinar a Abaqa y lo consiguieron probablemente en 1282. Le sucedió su hermano musulmán Tekuder, que fue derrotado y ejecutado el 10 de agosto de 1284 por su sobrino budista Arghun, hermano de nuestra protagonista.
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La expresión suprema de la belleza es la sencillez.
Alberto Durero.
