Ines escribió:
Clara escribió:
La anorexia y la bulimia, al ser trastornos de la conducta alimentaria, de alguna forma nos los "provocamos". Ojo, no estoy diciendo que no sean enfermedades mentales, sino que nacen como consecuencia de otro tipo de problemas, normalmente relacionados con la autoestima y la seguridad. Son facotres de riesgo los ideales de delgadez, la presión social, la insatisfacción con la imagen corporal...
Hay un tipo de anorexia nerviosa, en cambio, que es incontrolable. Aunque una no quiera padecerla, aunque una persona intente alimentarse correctamente, la puede padecer. Normalmente, aparece como resultado de otras enfermedades o cuadros clínicos como la ansiedad, los nervios, el insomnio...
Clara de mi corazón, no creo que la reina tenga ningún tipo de anorexia ni nerviosa ni primaria ni secundaria, ya hubiera desaparecido si fuese así, creo como dije que somatiza las situaciones que la desbordan: El somatizar es presentar síntomas físicos causados por una afección psicológica. Si bien puede tratarse de un trastorno psiquiátrico recurrente, es común que las personas muestren señales físicas molestas en momentos de estrés o presión psicológica, sin que necesariamente padezcan de una enfermedad específica.
Y menuda fortaleza mental ha tenido que tener para aguantar todo lo que lleva aguantado y además ya lo dijo: «Hago lo que puedo, llego a lo que llego y no es sano que se me exija tanto».
Una anorexia es muy distinto a adelgazar cuando tienes nervios, o comer menos porque se cierra el estómago.
El anoréxico literalmente se ve gordo aunque pese 30 kilos, no es solo que se deje llevar por la presión de la
moda, no. Miente y engaña, oculta que no come, finge que come y tira la comida... y puede llegar a ponerse en peligro de muerte por desnutrición. Yo tuve una amiga con ese problema en el instituto y he tenido unas cuantas alumnas con lo mismo.
Nada que ver conmigo, que bajé 7 kilos en los tres meses que estuvo mi madre en cuidados paliativos hasta que falleció. Yo me daba perfecta cuenta de que me bailaba la ropa y no tenía buena cara.