jabo escribió:
No comparto para nada vuestras criticas. El rey es cazador y con su tiempo libre que haga lo que quiera. Mientras cumpla con sus tareas no soy nadie para decir nada. Creo que no ha dejado ningún acto sin asistir ni a dejado de firmar nada para hacer este viaje. Lo mismo la Reina. ¿Quienes somos nosotros para decirles como tienen que vivir? Nos creemos jueces de todo.
No veo que nadie se enfade con los bancos ni con los políticos que nos han metido en esta crisis. Es más cómodo criticar a la Familia Real, total nunca se defienden y así el patio tiene un culpable y no miran los problemas gordos de cara.
Un Rey, o un Presidente de República durante el tiempo que permanezca en dicha posición, no tienen tiempo libre. Disponen de unas vacaciones cuidadosamente pautadas. El resto del año, puede haber "huecos en su agenda" y se les permiten algunas escapadas discretas siempre y cuando no coincidan con algún momento crítico en el país. España no tuvo la semana pasada una semana tranquila y apacible que otorgase al Jefe de Estado la oportunidad perfecta para largarse a dónde Cristo perdió la sandalia.
La Reina sí que no tenía obligación de quedarse, toda vez que el Jefe de Estado se había largado. Pero no ha sido bonito constatar, a raíz de los acontecimientos, que no cree oportuno volver desde tierras griegas ni siquiera en el caso extremo en que a su augusto marido le repatrían urgentemente para una intervención quirúrgica provocada por un accidente en la lejana África. No soy juez de la relación privada Juan Carlos/Sofía. Es más que probable que ella, como mujer, tenga docenas de motivos para esta actitud que equivale a un muy sonoro: "¡Qué te cuide tu madre!". Pero a Juan Carlos y Sofía reina, sí los juzgo, y la cuestión no es que yo tenga derecho a juzgarles, sino que más de cuarenta millones de españoles comparten el mismo derecho a juzgarles, efectivamente, porque son los Reyes, encarnan al Estado.
El Rey debería escoger mejor sus aficiones. Todos en España sabemos que es mujeriego y cazador, de los que practican caza mayor. Son dos cosillas ante las que la gente se limita al cotilleo morboso y a otra cosa, mariposa. En general, como pueblo, a nivel colectivo, tenemos una elevada tolerancia hacia los pecadillos de nuestros mandatarios. Pero hay que evitar que trasciendan las cosas de forma tan bochornosa cuando se trata del Rey, porque su posición, absolutamente única, no equiparable a la de nadie, exige una cierta ejemplaridad. El Ancien Règime se acabó hace siglos, ahora no se pueden permitir vivir como les dé la gana en una atmósfera que evoque cierta clase de opulencia decadente. El Rey lo sabe, vaya si lo sabe, después del escándalo que hubo en su día por la cacería de pobres osos rumanos. Por eso se va "de tapadillo", sin que se comente nada respecto al destino y objeto del viaje privado. Pero esta vez, por lo que ha pasado, le han pillado. Y cazar elefantes en Botsuana es algo que hiere muy profundamente la sensibilidad de millones de españoles, por lo tanto NO es la actividad recomendable en su tiempo libre. Que pruebe a hacer punto de cruz, igual que en su día el infante Antonio Pascual.